14.- Poniendo en práctica las esculturas de papel aluminio

Estos días de Semana Santa tengo el placer y la oportunidad de trabajar con niños más grandes (de 5 a 8 años) y he decidido poner en práctica las esculturas de papel aluminio, ya que algunas de mis compañeras lo han llevado a la práctica y yo me moría de ganas por hacerlo. Para empezar les he preguntado si sabían que eran las esculturas y todos han explicado a su manera lo que eran:

• Seño las esculturas son grandísimas y no caben aquí. Tienen forma de hombres.
• Seño también pueden ser chiquitillas y de otras formas. 

Luego les he preguntado de qué materiales estaban hechas las esculturas y en seguida han empezado a decir de barro, de escayola, de oro, de plata, de madera, e incluso uno ha dicho de papel. He sacado el papel de aluminio y les he preguntado si sabían que era y todos han dicho al unísono: "Donde se envuelven los bocadillos seño". Les he explicado que se trataba de papel aluminio y que aparte de para envolver bocadillos podía servir para hacer una escultura. Después he preguntado que cómo harían ellos la escultura de su propio cuerpo con el papel y ya han empezado a decir:

• Pues seño yo cogería el papel de aluminio y empezaría a enrollarlo como una momia.
• Por partes seño, primero los brazos, luego las piernas, y así y así hasta tenerlo todo y luego pues lo pegamos.

La verdad que me ha sorprendido gratamente porque iban muy bien encaminados. He pedido voluntarios para hacer de modelos, y han levantado todos la mano, pero en cuento he dicho que no podrían moverse durante un rato han bajado la mano y solo han quedado dos, los más atrevidos, 5 y 6 años respectivamente. 

Les he empezado a decir los pasos que teníamos que ir siguiendo, al igual que hicimos en el seminario, y en seguida se han empezado a motivar.

• 1º Preparamos la base de papel de aluminio:

• 2º Modelamos:

• 3º El resultado:

Cuando han visto el resultado, todos querían hacer una escultura de su cuerpo pero como no tenía papel aluminio suficiente les he propuesto hacer una escultura de sus manos y de muy buena gana han aceptado.

Les he dado a cada uno un trocito de papel de aluminio y nos hemos puesto manos a la obra, nunca mejor dicho.

Y ya que estaba, me he propuesto hacer una metáfora con sus manos:

"Todos somos diferentes" 

"Todos somos participes del proceso de enseñanza - aprendizaje"

Espero que os haya gustado, y sobretodo os animo a que lo llevéis al aula. Mis niños han disfrutado muchísimo y han trabajado en equipo como no podía imaginar. Ni que decir tiene que cuando han visto las fotos de las esculturas que hicimos en clase y las manos de escayola se han quedado boquiabiertos, y en seguida han empezado a preguntar como se hacían.